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Si quieres encontrar los mejores poemas cortos para niños que existen en el mundo, este blog es genial porque hoy queremos mostrarte una selección de los más lindos que pueden existir. Con ellos podrás hacer que los más pequeños dejen volar su imaginación y disfruten de poemas maravillosos en cualquier ocasión. Así que es una buena idea que sigas leyendo este blog y que sigas descubriendo poemas maravillosos que puedas compartir con los más pequeños y con quien desees.

 

35 Hermosos poemas cortos infantiles

Los poemas son una combinación de palabras muy linda que cuentan algo especial. Los poemas para niños son muy lindos y les permiten que su imaginación vuele a través de las palabras. En esta oportunidad te queremos regalar una selección de los mejores 35 poemas cortos infantiles que pueden existir, para que con ellos puedas disfrutar de un momento muy especial. Así que sigue leyendo y disfruta de este blog tan genial.

1.Agua, ¿dónde vas? (García Lorca)

Agua, ¿dónde vas?

Riendo voy por el río

a las orillas del mar.

 

Mar, ¿adónde vas?

Río arriba voy buscando

fuente donde descansar.

 

Chopo, y tú ¿qué harás?

No quiero decirte nada.

Yo…, ¡temblar!

 

¿Qué deseo, qué no deseo,

por el río y por la mar?

Cuatro pájaros sin rumbo

en el alto chopo están.

2. Los ratones (Lope de Vega)

Juntáronse los ratones

para librarse del gato;

y después de largo rato

de disputas y opiniones,

dijeron que acertarían

en ponerle un cascabel,

que andando el gato con él,

librarse mejor podrían.

 

Salió un ratón barbicano,

colilargo, hociquirromo

y encrespando el grueso lomo,

dijo al senado romano,

después de hablar culto un rato:

 

¿Quién de todos ha de ser

el que se atreva a poner

ese cascabel al gato?

3. Abril ( Juan Ramón Jiménez)

El chamariz en el chopo.

-¿Y qué más?

 

El chopo en el cielo azul.

– ¿Y qué más?

 

El cielo azul en el agua.

– ¿Y qué más?

 

El agua en la hojita nueva.

– ¿Y qué más?

 

La hojita nueva en la rosa.

– ¿Y qué más?

 

La rosa en mi corazón.

– ¿Y qué más?

 

¡Mi corazón en el tuyo!

4. La mariposa (García Lorca)

Mariposa del aire

¡que hermosa eres!

Mariposa del aire

dorada y verde.

 

Luz de candil…

Mariposa del aire,

quédate ahí, ahí, ahí.

 

No te quieres parar,

pararte no quieres…

Mariposa del aire,

dorada y verde.

 

Luz de candil…

Mariposa del aire,

quédate ahí, ahí, ahí.

quédate ahí.

Mariposa ¿estás ahí?

5. Canción de cuna del elefante (Adriano del Valle)

El elefante lloraba

porque no quería dormir…

Duerme elefantito mío,

que la luna te va a oír…

 

Papá elefante está cerca,

se oye en el Manglar su mugir;

Duerme elefantito mío,

que la luna te va a oír…

 

El elefante lloraba

y alzaba su trompa al viento…

parecía que en la luna

se limpiaba la nariz.

6. El reino del revés (Maria Elena Walsh )

Me dijeron que en el Reino del Revés

Nada el pájaro y vuela el pez

Que los gatos no hacen miau y dicen yes

Porque estudian mucho inglés

 

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

 

Me dijeron que en el reino del revés

Nadie baila con los pies

Que un ladrón es vigilante y otro es juez

Y que dos y dos son tres

 

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

 

Me dijeron que en el reino del revés

Cabe un oso en una nuez

Que usan barbas y bigotes los bebés

Y que un año dura un mes

 

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

 

Me dijeron que en el reino del revés

Hay un perro pekinés

Que se cae para arriba y una vez

No pudo bajar después

 

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

 

Me dijeron que en el reino del revés

Un señor llamado Andrés

Tiene 1.530 chimpancés

Que si miras no los ves

 

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

 

Me dijeron que en el reino del revés

Una araña y un ciempies

Van montados al palacio del Marqués

En caballos de ajedrez

 

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

Vamos a ver como es

El Reino del Revés

7. El brujito de Gulubú (Maria Elena Walsh)

Había una vez un bru,

un brujito que en Gulubú

a toda la población

embrujaba sin ton ni son.

 

Pero un día llegó el Doctorrrr

manejando un cuatrimotorrrr

¿Y saben lo que pasó?

 

¿No?

 

Todas las brujerías

del brujito de Gulubú

se curaron con la vacú

con la vacuna

luna luna lu.

 

Ha sido el brujito el u,

uno y único en Gulubú

que lloró, pateó y mordió

cuando el médico lo pinchó.

 

Y después se marchó el Doctorrrr

manejando un cuatrimotorrrr

¿Y saben lo que pasó?

 

¿No?

Todas las brujerías

del brujito de Gulubú

se curaron con la vacú

con la vacuna

luna luna lu.

8. Pegasos, lindos pegasos (Antonio Machado)

Pegasos, lindos pegasos,

caballitos de madera.

Yo conocí siendo niño,

la alegría de dar vueltas

sobre un corcel colorado,

en una noche de fiesta.

 

En el aire polvoriento

chispeaban las candelas,

y la noche azul ardía

toda sembrada de estrellas.

 

¡Alegrías infantiles

que cuestan una moneda

de cobre, lindos pegasos,

caballitos de madera!

9. Llega el invierno (Marisol Perales)

El señor invierno

se viste de blanco,

se pone el abrigo

porque está temblando.

 

Se va a la montaña,

se mete en el río,

y el parque y la calle

se llenan de frío.

 

Se encuentra a la lluvia

llorando, llorando,

y también al viento

que viene soplando.

 

¡Ven amigo sol!

Grita en el camino,

pero el sol no viene

porque se ha dormido.

10. La vaca estudiosa (María Elena Walsh)

Había una vez una vaca

en la Quebrada de Humahuaca.

Como era muy vieja,

muy vieja, estaba sorda de una oreja.

 

Y a pesar de que ya era abuela

un día quiso ir a la escuela.

Se puso unos zapatos rojos,

guantes de tul y un par de anteojos.

 

La vio la maestra asustada

y dijo: – Estas equivocada.

Y la vaca le respondió:

¿Por qué no puedo estudiar yo?

 

La vaca, vestida de blanco,

se acomodó en el primer banco.

Los chicos tirábamos tiza

y nos moríamos de risa.

La gente se fue muy curiosa

a ver a la vaca estudiosa.

La gente llegaba en camiones,

en bicicletas y en aviones.

 

Y como el bochinche aumentaba

en la escuela nadie estudiaba.

La vaca, de pie en un rincón,

rumiaba sola la lección.

 

Un día toditos los chicos

se convirtieron en borricos.

Y en ese lugar de Humahuaca

la única sabia fue la vaca.

11. Migas de risa ( Almudena Orellana Palomares)

Érase que se era

la historia de Elisa,

la pastelera.

 

Amasaba alegría

Elisa,

de trozo en trozo,

con montañas de harina,

huevo…

¡y migas llenas de risa!

Milhoja de salsa y fresa

para Señora Tristeza.

Bizcocho de risa y coco

para Don Paco

¡y poco!

 

[¡Que de la risa

se cae el moco!]

 

Érase que se era

en una asombrosa aldea,

la historia de Elisa,

la pastelera.

12. Bañar la luna (María Elena Walsh)

Ya la Luna baja en camisón

a bañarse en un charquito con jabón.

Ya la Lunabaja en tobogán

revoleando su sombrilla de azafrán.

 

Quien la pesque con una cañita de bambú,

se la lleva a Siu Kiu.

 

Ya la luna viene en palanquin

a robar un crisantemo del jardín

Ya la luna viene por allí

su kimono dice no, no y ella sí.

 

Quien la pesque con una cañita de bambú,

se la lleva a Siu Kiu.

 

Ya la luna baja muy feliz

a empolvarse con azúcar la nariz

Ya la luna en puntas de pie

en una tacita china toma té

 

Quien la pesque con una cañita de bambú,

se la lleva a Siu Kiu.

 

Ya la luna vino y le dio tos

por comer con dos palitos el arroz

Ya la luna baja desde allá

y por el charquito-quito nadará

 

Quien la pesque con una cañita de bambú,

se la lleva a Siu Kiu

13. Las gaviotas (Julián Alonso)

Mira las gaviotas

Volando en el puerto

Con sus alas blancas

Abiertas al viento.

 

Parecen cometas

Parecen pañuelos

Son sábanas blancas

que van por el cielo.

14. Soñar con mañana (Almudena Orellana Palomares)

Y sí que podíamos…

Cerrar bien las puertas,

cuidar de los nuestros,

guardarnos los besos.

 

Abrir las ventanas,

pintar arco iris,

soñar con mañana.

Y sí que podíamos…

 

Quién iba a decirnos

que toda esa fuerza

ya la teníamos.

15. NUBE, NUBE ( Almudena Orellana Palomares)

Nube que subes

por los tejados.

Nube que bajas

sembrando charcos.

 

Nube que sube,

nube que baja,

nube que vuela

sin dejar marcas.

 

Nube que pinta sombras,

nube que ahueca sueños;

nube que viaja

surcando el cielo.

 

Nube que subes,

nube que bajas,

nube que vuelas

sobre mi almohada.

16. La Tarara (Federico García Lorca)

La Tarara, sí;

la tarara, no;

la Tarara, niña,

que la he visto yo.

 

Lleva la Tarara

un vestido verde

lleno de volantes

y de cascabeles.

 

La Tarara, sí;

la tarara, no;

la Tarara, niña,

que la he visto yo.

 

Luce mi Tarara

su cola de seda

sobre las retamas

y la hierbabuena.

 

Ay, Tarara loca.

Mueve, la cintura

para los muchachos

de las aceitunas.

17. Las siete vidas del gato (Rafael Pombo)

Preguntó al gato Mambrú

el lebrel Perdonavidas:

— Pariente de Micifú,

¿qué secreto tienes tú

para vivir siete vidas?

 

Y Mambrú le contestó:

—Mi secreto es muy sencillo,

pues no consiste sino

en frecuentar como yo

el aseo y el cepillo.

18. ¡Buen viaje! (Amado Nervo)

Con la mitad de un periódico hice un buque de papel,

que en la fuente de mi casa va navegando muy bien.

Mi hermana con su abanico, sopla y sopla sobre él.

¡Muy buen viaje!

¡Muy buen viaje,

buquecito de papel!

19. La plaza tiene una torre (Antonio Machado)

La plaza tiene una torre,

la torre tiene un balcón,

el balcón tiene una dama,

la dama una blanca flor.

 

Ha pasado un caballero,

¡quién sabe por qué pasó!,

y se ha llevado la plaza

con su torre y su balcón,

con su balcón y su dama,

su dama y su blanca flor.

20. Era un niño que soñaba (Antonio Machado)

Era un niño que soñaba

un caballo de cartón.

Abrió los ojos el niño

y el caballito no vio.

 

Con un caballito blanco

el niño volvió a soñar;

y por la crin lo cogía…

¡Ahora no te escaparás!

 

Apenas lo hubo cogido,

el niño se despertó.

Tenía el puño cerrado.

¡El caballito voló!

 

Quedóse el niño muy serio

pensando que no es verdad

un caballito soñado.

Y ya no volvió a soñar.

21. Paisaje (Federico García Lorca)

La tarde equivocada

se vistió de frío.

 

Detrás de los cristales

turbios, todos los niños,

ven convertirse en pájaros

un árbol amarillo.

 

La tarde está tendida

a lo largo del río.

Y un rubor de manzana

tiembla en los tejadillos.

22. Palomita en la playa (Anónimo)

A la orilla del mar

canta una paloma;

dulcemente canta,

tristemente llora,

dulcemente canta

la blanca paloma;

se van los pichones

y la dejan sola.

23. El sapito glo… glo… glo… (José Sebastián Tallon)

 

Nadie sabe dónde vive

nadie en la casa lo vió.

Pero todos escuchamos

al sapito glo…glo…glo…

 

¿Vivirá en la chimenea?

¿Dónde diablos se escondió?

¿Dónde canta cuando llueve

el sapito glo…glo…glo?

 

¿Vive acaso en la azotea?

¿Se ha metido en un rincón?

¿Está abajo de la cama?

¿Vive oculto en una flor?

 

Nadie sabe dónde vive,

nadie en la casa lo vio.

Pero todos escuchamos

cuando llueve: glo…glo…glo…

24. Canción del gallito equivocado (José Sebastián Tallon)

Canta el gallito a la una

para anunciar la mañana.

¡Co-co-ro-có! ¡Y es de Luna

la claridad que lo engaña!

 

Canta el gallito a las dos

para anunciar la alborada.

¡Co-co-ro-có! ¡Y es la Luna!

¡Y es la Luna blanca, blanca!

 

Canta el gallito a las tres

la canción equivocada.

¡Co-co-ro-có! ¡Y es la Luna!

¡Y es la Luna, que lo engaña!

 

Y a la una, dos y tres,

para el nuevo día canta.

¡Co-co-ro-có! ¡Y es la Luna!

Y es la Luna blanca, blanca.

25. El burro flautista (Tomás de Iriarte y Oropesa)

Esta fabulilla,

salga bien o mal,

me ha ocurrido ahora

por casualidad.

 

Cerca de unos prados

que hay en mi lugar,

pasaba un borrico

por casualidad.

 

Una flauta en ellos

halló, que un zagal

se dejó olvidada

por casualidad.

 

Acercóse a olerla

el dicho animal,

y dio un resoplido

por casualidad.

 

En la flauta el aire

se hubo de colar,

y sonó la flauta

por casualidad.

 

“¡Oh!”, dijo el borrico,

“¡qué bien sé tocar!

¡y dirán que es mala

la música asnal!”.

 

Sin reglas del arte,

borriquitos hay

que una vez aciertan

por casualidad.

26. Dame la mano (Gabriel Mistral)

Dame la mano y danzaremos;
dame la mano y me amarás.
Como una sola flor seremos,
como una flor, y nada más…

El mismo verso cantaremos,
al mismo paso bailarás.
Como una espiga ondularemos,
como una espiga, y nada más.

Te llamas Rosa y yo Esperanza;
pero tu nombre olvidarás,
porque seremos una danza
en la colina y nada más…

27. Doña Pitu Piturra (Gloria Fuertes)

Doña Pito Piturra
tiene unos guantes,
Doña Pito Piturra
muy elegantes.

Doña Pito Piturra
tiene un sombrero,
Doña Pito Piturra
con un plumero.

Doña Pito Piturra
tiene un zapato,
Doña Pito Piturra
le viene ancho.

Doña Pito Piturra
tiene toquillas,
Doña Pito Piturra
con tres polillas.

Doña Pito Piturra
tiene unos guantes,
Doña Pito Piturra
le están muy grandes.

Doña Pito Piturra
tiene unos guantes,
Doña Pito Piturra
¡lo he dicho antes!

28. Todo está en su sitio (Gloria Fuertes)

Los lobos en el monte,
los pollitos en el corral,
los peces en el agua,
los barcos en el mar.

Ya todo está en su sitio,
ya todo en su lugar.
Los niños en la escuela
y los patos a volar.

29. Promesa a las estrellas (Gabriela Mistral)

Ojitos de las estrellas
abiertos en un oscuro
terciopelo: de lo alto,
¿me veis puro?

Ojitos de las estrellas,
prendidos en el sereno
cielo, decid: desde arriba,
¿me veis bueno?

Ojitos de las estrellas,
de pestañitas inquietas,
¿por qué sois azules, rojos
y violetas?

Ojitos de la pupila
curiosa y trasnochadora,
¿por qué os borra con sus rosas
la aurora?

Ojitos, salpicaduras
de lágrimas o rocío,
cuando tembláis allá arriba,
¿es de frío?

Ojitos de las estrellas,
fijo en una y otra os juro
que me habéis de mirar siempre,
siempre puro.

30. El gato en el tejado (Miss Paola)

El gato en el tejado está hambriento y enojado.

Anda buscando un ratón, pero ninguno ha encontrado.
Ya no es el joven de antes, ya no brinca, corre o casi vuela.
Está tan viejo y cansado que ni el hambre lo desvela.

Llegó la hora de dormir. El gato en el tejado bajo la luna sueña.
Mañana será otro día, no estará hambriento y enojado.
Tal vez encuentre un ratón, tal vez encuentre a la niña…
que hasta poco fue su dueña.

31. El gallo despertador (Gloria fuertes)

Kikirikí,
estoy aquí,
decía el gallo
Colibrí.
El gallo Colibrí
era pelirrojo,
y era su traje
de hermoso plumaje.
Kikirikí.
levántate campesino,
que ya está el sol
de camino.
-Kikiriki.
levántate labrador,
despierta con alegría,
que viene el dia.
-Kikiriki.
Niños del pueblo
despertad con el ole,
que os esperan en el «cole’.
El pueblo no necesita reloj,
le vale el gallo despertador.

32. Cómo se dibuja a un niño (Gloria fuertes)

Para dibujar un niño hay que hacerlo con cariño.
Pintarle mucho flequillo,
-que esté comiendo un barquillo;
muchas pecas en la cara que se note que es un pillo;
– pillo rima con flequillo y quiere decir travieso -.
Continuemos el dibujo: redonda cara de queso.
Como es un niño de moda, bebe jarabe con soda.
Lleva pantalón vaquero con un hermoso agujero;
camiseta americana y una gorrita de pana.
Las botas de futbolista – porque chutando es artista -.
Se ríe continuamente, porque es muy inteligente.
Debajo del brazo un cuento por eso está tan contento.
Para dibujar un niño hay que hacerlo con cariño.

33. En una cajita de fósforos (Maria Elena Walsh)

En una cajita de fósforos
se pueden guardar muchas cosas.

Un rayo de sol, por ejemplo
(pero hay que encerrarlo muy rápido,
si no, se lo come la sombra)
Un poco de copo de nieve,
quizá una moneda de luna,
botones del traje del viento,
y mucho, muchísimo más.

Les voy a contar un secreto.
En una cajita de fósforos
yo tengo guardada un lagrima,
y nadie, por suerte la ve.
Es claro que ya no me sirve
Es cierto que esta muy gastada.

Lo se, pero que voy a hacer
tirarla me da mucha lastima

Tal vez las personas mayores
no entiendan jamas de tesoros
Basura, dirán, cachivaches
no se porque juntan todo esto
No importa, que ustedes y yo
igual seguiremos guardando
palitos, pelusas, botones,
tachuelas, virutas de lápiz,
carozos, tapitas, papeles,
piolín, carreteles, trapitos,
hilachas, cascotes y bichos.

En una cajita de fósforos
se pueden guardar muchas cosas.
Las cosas no tienen mamá.

34. Adiós sol (Federico García Lorca)

¡Adiós, sol!
¡Adiós, sol!
Bien sé que eres la luna,
pero yo
no lo diré a nadie,
sol.

Te ocultas
detrás del telón
y disfrazas tu rostro
con polvos de arroz.

De día, la guitarra del labrador;
de noche, la mandolina
de pierrot.

¡Qué más da!
tu ilusión es crear el jardín
multicolor.

¡Adiós, sol!
no olvides lo que te ama
el caracol,
la viejecilla
del balcón, y yo…
que juego al trompo con mi…
corazón.

35. Balada del caracol negro (Federico García Lorca)

Caracoles negros.
Los niños sentados
escuchan un cuento.

El río traía
coronas de viento
y una gran serpiente
desde un tronco viejo
miraba las nubes
redondas del cielo.

Niño mío chico
¿dónde estás?
Te siento
en el corazón
y no es verdad.

Lejos esperas que yo saque
tu alma del silencio.
Caracoles grandes.
Caracoles negros.

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