5/5 - (2 votos)

La amistad es algo digno de celebración, de festejo, de alegría; por tal motivo, no es de extrañarse que los mismos poetas intervengan en semejante sentimiento para describirlo de la mejor manera. A continuación, en sintonía con lo dicho, presentamos una selección de poemas de amistad: anónimos y de autores célebres para compartir. 

Poemas de amistad de autores anónimos

La Amistad Eterna (anónimo)

En la profundidad del alma,
donde los lazos se entrelazan,
florece la amistad eterna,
que nunca se deshace ni se desgasta.

Compañeros de Camino (Anónimo)

En el camino de la vida,
encontré compañeros sinceros,
juntos enfrentamos la subida,
y celebramos nuestros logros verdaderos.

La Luz de la Amistad (Anónimo)

Como faro en la noche oscura,
la amistad ilumina nuestro sendero,
guiándonos con su calidez pura,
haciendo de la vida un tesoro sincero.

La Esencia del Vínculo (Anónimo)

En la esencia del vínculo profundo,
se forja lazos irrompibles,
la amistad, como un lazo fecundo,
nos une en momentos imposibles.

Risas Compartidas (Anónimo)

En las risas compartidas,
en los secretos guardados,
se encuentra la esencia de la vida,
en los lazos de amistad sellados.

Abrazo de Amigos (Anónimo)

Como un abrazo cálido en invierno,
la amistad nos envuelve con ternura,
brindando consuelo sincero,
en cada prueba, en cada aventura.

Flores de la Amistad (Anónimo)

Como flores en un jardín,
así son los amigos en la vida,
cada uno único y divino,
su existencia es divina.

Complicidad de Almas (Anónimo)

En la complicidad de almas gemelas,
se gesta la amistad más sincera,
donde no hay juicio ni fronteras,
solo amor que perdura y persevera.

Guardianes del Corazón (Anónimo)

Amigos son guardianes del corazón,
custodian nuestros sueños y anhelos,
en su presencia, encontramos razón,
para seguir adelante, sin recelos.

El Vínculo Inquebrantable (Anónimo)

Como el roble firme en la tormenta,
la amistad permanece inquebrantable,
soportando las pruebas que enfrenta,
siendo siempre un lazo insustituible.

Manos Entrelazadas (Anónimo)

Como manos entrelazadas en la danza,
así son los amigos en la vida,
compartiendo la alegría y la esperanza,
en cada paso, en cada despedida.

Diálogo del Alma (Anónimo)

En el diálogo del alma,
se fragua la amistad más pura,
donde no existen máscaras ni drama,
solo complicidad sincera y segura.

Viaje de la Amistad (Anónimo)

La amistad es un viaje sin destino,
donde cada encuentro es un nuevo inicio,
juntos enfrentamos cualquier camino,
celebrando cada momento como un indicio.

Brazos Abiertos (Anónimo)

Amigos son brazos abiertos en la tormenta,
refugio seguro en la noche oscura,
con ellos, cualquier carga se enfrenta,
porque juntos, el amor perdura.

El Tesoro de la Amistad (Anónimo)

Como un tesoro en el corazón guardado,
la amistad brilla con luz propia,
en su calor, encontramos resguardo,
en su presencia, la vida se torna rica.

La Canción de la Amistad (Anónimo)

En cada risa, en cada abrazo,
resuena la canción de la amistad,
una melodía que nunca se desgasta,
un lazo eterno que no tiene final.

Acompañantes de Alma (Anónimo)

Amigos son acompañantes de alma,
en el viaje efímero de la existencia,
juntos escribimos nuestra propia calma,
compartiendo la esencia de la esencia.

El Reflejo del Alma

En el reflejo del alma encontramos,
la verdadera esencia de la amistad,
un lazo que en el tiempo no se desgasta,
y en cada encuentro se fortalece de verdad.

Semillas de Amistad

Como semillas en la tierra fértil,
así son los amigos en la vida,
creciendo juntos, sin límites,
en un vínculo que nunca se olvida.

El Abrazo del Universo

La amistad es como el abrazo del universo,
infinita en su grandeza y su luz,
un regalo divino que nunca es obsoleto,
en su calor, encontramos paz y virtud.

Poemas célebres sobre la amistad

Un árbol venenoso (William Blake)

Estaba enfadado con mi amigo;
le conté mi enojo, y mi enojo terminó.
Estaba enfadado con mi enemigo:
no lo dije, y mi enojo creció.

Y lo regué con miedo,
noche y día con mis lágrimas:
y lo asoleé con sonrisas,
con suaves y embusteros engaños.

Así creció noche y día,
hasta que dio luz a una manzana brillante.
Y mi enemigo contempló su brillo,
y comprendió que era mía.

Y se entrometió en mi jardín,
cuando la noche cubría el polo;
y por la mañana estuve contento de ver
a mi enemigo extendido bajo el árbol.

La flecha y la canción (Henry Wadsworth Longfellow)

Lancé una flecha al cielo azul.
Cayó en la tierra, ignoro dónde.
Partió tan rauda que la vista
seguir su vuelo no logró.

Una canción lancé a los aires.
Cayó en la tierra, ignoro dónde.
¿Qué ojos pueden seguir el vuelo
infinito de una canción?

Mucho más tarde hallé en un roble
la flecha, entera todavía;
y la canción la encontré intacta
en el corazón de un amigo.

Hermanos y amigos (Delia Arjona)

Los amigos son hermanos
que nosotros elegimos,
los que te ofrecen la mano
cuando te encuentras perdido.
Son las puertas que se te abren
y se juntan los caminos,
cuando estás necesitado
sus brazos son extendidos.
Suaves rayitos de sol,
que te dan calor y abrigo.
El amor se fortalece
¡cuando tienes un amigo!

Gacela de la amistad (Carmen Díaz)

La amistad es una ráfaga de peces luminosos,
y te arrastra
hacia un océano feliz de mariposas.

La amistad es un plañir de campanas
que invocan el aroma de los cuerpos
en un jardín amanecido de heliotropos.

Los amigos (Julio Cortázar)

En el tabaco, en el café, en el vino,
al borde de la noche se levantan
como esas voces que a lo lejos cantan
sin que se sepa qué, por el camino.

Livianamente hermanos del destino,
dióscuros, sombras pálidas, me espantan
las moscas de los hábitos, me aguantan
que siga a flote entre tanto remolino.

Los muertos hablan más, pero al oído,
y los vivos son mano tibia y techo,
suma de lo ganado y lo perdido.

Así un día en la barca de la sombra,
de tanta ausencia abrigará mi pecho
esta antigua ternura que los nombra.

A la amistad (Alberto Lista)

La ilusión dulce de mi edad primera,
del crudo desengaño la amargura,
la sagrada amistad, la virtud pura
canté con voz ya blanda, ya severa.

No de Helicón la rama lisonjera
mi humilde genio conquistar procura;
memorias de mi mal y mi ventura,
robar al triste olvido solo espera.

A nadie, sino a ti, querido Albino,
debe mi tierno pecho y amoroso
de sus afectos consagrar la historia.

Tú a sentir me enseñaste, tú el divino
canto y el pensamiento generoso:
Tuyos mis versos son y esa es mi gloria.

Cultivo una rosa blanca (José Martí)

Cultivo una rosa blanca
en junio como en enero,
para el amigo sincero,
que me da su mano franca.
Y para el cruel que me arranca
el corazón con que vivo,
cardo ni ortiga cultivo
cultivo una rosa blanca.

Amistad a ultranza (José de Arias Martínez)

Alma a alma así es que nace,
una amistad verdadera,
a fuerza de ser muy sincera,
corazón a corazón,
es una entrega de amor,
sin contratos ni promesas.
Porque existe comprensión,
porque existe aceptación,
sin precisar de perdón,
pues se entrega sin reservas,
la amistad tú la conservas
cuando solo existe amor.

Ni el ni yo (Cecilia Casanova)

Ni él, ni yo
nos dimos cuenta
que nuestra amistad
estaba llena
de recovecos.
Traducirla
habría sido
sacrílego.

Decir amigo (Joan Manuel Serrat- fragmento)

Decir amigo
es decir juegos,
escuela, calle y niñez.
Gorriones presos
de un mismo viento
tras un olor de mujer.

Amistad (Carlos Castro Saavedra)

Amistad es lo mismo que una mano
que en otra mano apoya su fatiga
y siente que el cansancio se mitiga
y el camino se vuelve más humano.

El amigo sincero es el hermano
claro y elemental como la espiga,
como el pan, como el sol, como la hormiga
que confunde la miel con el verano.

Grande riqueza, dulce compañía
es la del ser que llega con el día
y aclara nuestras noches interiores.

Fuente de convivencia, de ternura,
es la amistad que crece y se madura
en medio de alegrías y dolores.

Amistad (Zoraida Armengol)

Es una de las palabras más bonitas
y de los sentimientos más sentidos.

Obedece y atiende a ningún partido
y convierte en risas todas las cuitas.

La amistad no sabe ser egoísta;
no es del presente, ni del pasado ido.
En lo transcendental puro hace nido
y es incondicional mientras exista.
Es perdonar, tratando de comprender.
Es poder confiar creando una hermandad.
Es respetar y aceptar al otro como es.
Es no criticar, admirar y ceder.
Estar en la alegría y la adversidad.
Es seguir fiel, aunque el mundo ande al revés.

No moriré del todo amiga mía (Rodolfo Tallón)

No moriré del todo, amiga mía,
mientras viva en tu alma mi recuerdo.
Un verso, una palabra, una sonrisa,
te dirán claramente que no he muerto.

Volveré con las tardes silenciosas,
con la estrella que brilla para ti,
con la brisa que nace entre las hojas,
con la fuente que sueña en el jardín.

Volveré con el piano que solloza
las nocturnas escalas de Chopin;
con la lenta agonía de las cosas
que no saben morir.

Con todo lo romántico, que inmola
este mundo cruel que me destroza.
A tu lado estaré cuando estés sola,
como una sombra más junto a tu sombra.

La amistad es amor (Pedro Prado)

La amistad es amor en serenos estados.
Los amigos se hablan cuando están más callados.
Si el silencio interrumpe, el amigo responde
mi propio pensamiento que también él esconde.

Si él comienza prosigo el curso de su idea;
ninguno de nosotros la formula ni crea.
Sentimos que hay un algo superior que nos guía
y logra la unidad de nuestra compañía…

Y nos vemos llevados a pensar con hondura,
y a lograr certidumbre en la vida insegura;
y sabemos que encima de nuestras apariencias,

se adivina un saber más allá de las ciencias.
Y por eso yo busco el tener a mi lado
el amigo que entienda cuanto digo callado.

El amigo que duerme (Cesare Pavese)

¿Qué le diremos esta noche al amigo que duerme?
La palabra más tenue nos sube a los labios
desde la pena más atroz. Miraremos al amigo,
sus inútiles labios que no dicen nada,
quedamente hablaremos.

La noche tendrá el rostro
del antiguo dolor que cada tarde resurge,
impasible y vivo. El silencio remoto
sufrirá como un alma, mudo, en la oscuridad.
Le hablaremos a la noche, que levemente respira.

Oiremos los instantes goteando en lo oscuro,
más allá de las cosas, en la ansiedad del alba
que vendrá de improviso esculpiendo las cosas
contra el silencio muerto. La luz inútil
develará la faz absorta del día. Los instantes
callarán. Y hablarán quedamente las cosas.

Los amigos (Robert Lowell)

Los amigos son tan, pero tan
espeluznantemente bellos
que yo les gritaría ¡Bienvenidos! gozoso
lleno de lágrimas
así vinieran del Infierno.

Poema 8 (John Burroughs)

Aquel quien, cuando te vas, te extraña con tristeza
Aquel quien, a tu retorno, te recibe con alegría
Aquel cuya irritación jamás se deja notar
Ese es a quien yo llamo un amigo.

Aquel quien más pronto da que pide
Aquel quien es el mismo hoy y mañana
Aquel quien compartirá tu pena igual que tu alegría
Ese es a quien yo llamo un amigo.

Aquel quien siempre está dispuesto a ayudar
Aquel cuyos consejos siempre fueron buenos
Aquel quien no teme defenderte cuando te atacan
Ese es a quien yo llamo un amigo.

Si un día (Gabriel García Lorca)

Si algún día quieres llorar, llámame,
no prometo hacerte reír, pero puedo llorar contigo.

Si un día logras escapar, no dudes en llamarme,
no prometo pedirte que te quedes, pero podré escapar contigo.

Si un día no quieres hablar con nadie, llámame,
estaremos en silencio.

Pero si me llamas un día y no contesto, ven corriendo a mí,
porque sin duda, te necesitaré.

Poema de la amistad (Octavio Paz)

La amistad es un río y un anillo.

El río fluye a través del anillo.
El anillo es una isla en el río.

Dice el río: antes no hubo río, después solo río.
Antes y después: lo que borra la amistad.

¿Lo borra? El río fluye y el anillo se forma.
La amistad borra al tiempo y así nos libera.

Es un río que, al fluir, inventa sus anillos.
En la arena del río se borran nuestras huellas.

En la arena buscamos al río: ¿dónde te has ido?
Vivimos entre olvido y memoria:

Este instante es una isla combatida por el tiempo incesante.

Amiga (Pedro Salinas)

Para cristal te quiero,
nítida y clara eres.
Para mirar al mundo,
a través de ti, puro,
de hollín o de belleza,
como lo invente el día.
Tu presencia aquí, sí,
delante de mí, siempre,
pero invisible siempre,
sin verte y verdadera.
Cristal. ¡Espejo, nunca!